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Surfacing: Lo clásico vs. lo romántico

Writer's picture: adrianadominguez8adrianadominguez8

Updated: Apr 30, 2022

En el caso de la historia de la arquitectura, es importante comprender cuales fueron los principales movimientos y estilos que han consagrado la teoría de la arquitectura que se estudia hoy en día. Es clave entender que los movimientos o estilos surgen como reacciones, continuidades o rupturas de otros. Por ejemplo, el estilo clásico en la arquitectura se concentra en las grandes dimensiones construidas en piedra a partir del orden, simetría, geometría y la creación de perspectiva. Por otro lado, el estilo romántico de la arquitectura significó el rescate de la arquitectura medieval y del oriente en oposición a la arquitectura neoclásica. Este estilo fue marcado por un discurso pintoresco en la decoración, el rechazo de la simetría, la irregularidad espacial y volumétrica, y el sentido orgánico de las formas. De tal forma, estudiando las figuras clave de estos estilos y las doctrinas que practicaban se puede obtener una perspectiva más holística de la arquitectura y las estrategias que estos estilos pueden ofrecer para resolver cualquier dilema arquitectónico como es la forma versus el contorno. Por ende, vemos las practicas clásicas de Durand versus las desiciones románticas de Wagner ante un mismo programa como fueron los teatros del siglo XIX.


El contorno es definido como un trazo que delimita zonas para hacer resaltar la líneas de un espacio. Sin embargo, la forma se define como la envoltura física a la solución espacial. Para Durand y Wagner, estos conceptos significaban distintas estrategias en base a sus creencias de estilos o movimientos. La doctrina de J. N. L. Durand, alumno de Boullée, aplica criterios de composición a esquemas de organización de programas a partir de un fin arquitectónico para dotar al edificio de estructura formal y genesis ideal de la complejidad de sus partes. De esta manera, las obras de templos y teatros redondos de Durand muestran su recurrencia al estilo clásico en cuanto al contorno prefiriendo las formas simples y mejor definidas como símbolo de simplicidad, adecuación, economía. Además adopta la sistematización de la cuadricula y establecimiento de ejes para dotar jerarquías espaciales mediante la composición de croquis que más adelante se convierten en planta de sus obras. De este modo, se puede decir que para Durand el recubrimiento es reflejo del interior y las figuras simples dan paso a esquemas de composición en planta que representan la función mediante el uso de la sistematización de una reticula estructural que también le da orden al revestimiento. Estas tendencias también se pueden observar en las obras del arquitecto Rafael Moneo quien en el Kurssal en San Sebastian decide utilizar una lógica clásica y repetitiva en la construcción del recubrimiento de la piel del edificio.


Sin embargo, para una figura del romanticismo moderno como Wagner la forma y el contorno es una oportunidad de redención revolucionaria para romper todo un loco orden de cosas desde la perspectiva de las emociones y lo inusual. Por ende, obras de Wagner como el teatro de Paris exhiben lo sublime del arte al envolver todos los componentes de un teatro en un todo. Cabe destacar que, esta estrategia no toma en consideración todo el espacio perdido en el techo para lograr la envoltura ya que la prioridad es poner la mecánica industrial en servicio de la expresión dramática. Además exhibe una crítica constructiva hacia la civilización moderna al tener una forma interior recubierta por un contorno que la esconde. Otro aspecto de lo romántico, es la prioridad del ser humano como el centro de todo, por ende, Wagner le da jerarquía al espacio de vestíbulo al tener casi el mismo espacio del espectáculo como critica a las figuras políticas y la usurpación de las personas como parte del drama. Es así que Wagner consigue integrar los componentes del neoclásico con la emoción y crítica del romanticismo para revertir la historia a lo natural con la información suficiente para ser entendido. Esta tendencia de ruptura claramente se puede comparar con el trabajo del arquitecto Frank Gehry en el museo Guggenheim en Bilbao que integra el orden espacial de los Neoclásico en planta con la referencia artística de un techo que sirve como contorno de pliegues escultóricos.


Se puede decir que la teoría de la arquitectura es una conversación de reacciones, continuidades o rupturas de estilos o movimientos comparados unos con los otros. Pero también va mas allá de crear arquitectura para ser encasillada dentro de un estilo o movimiento. Es en sí una conversación de preferencias y creencias entre las figuras que practican la profesión. El arquitecto decide qué concepto tiene más peso sobre el otro ya que una cosa es la forma de un edificio y otra es el contorno con el que se envuelve para reforzar esa genesis ideal. ¿Es símbolo o es cobertizo? Entonces, como estudiante de arquitectura uno se pregunta: ¿Nos hemos equivocado en mirar figuras como Durand y Wagner o Moneo o y Gehry como opuestos? ¿Es la arquitectura una conversación de qué es racional y qué no? ¿Es la teoría de la arquitectura una mejor conversación desde los pro y contras de las diferentes estrategias que nos ofrecen un sin numero de estilos y movimientos? ¿Es la tendencia tan racional si me sirve como estrategia a lo que yo estoy proponiendo como proyecto?

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